No han pasado ni cinco días desde la última vez que estábamos por la calle gritando lo primero que se nos cruzara por la cabeza. Estaba lejos de casa, con otra gente, una cultura muy distinta a la mía, "extrañando" estar en mi cuarto, en mi cama, cerca de mi familia y amigos, pero nunca se me cruzó por la mente tener que despedirme de ustedes, porque simplemente nunca quise hacerlo...
No con todos conviví mucho tiempo, pero les aseguro que cada sonrisa era por ustedes; así que gracias, gracias por sacar lo mejor de mi y por darme lo mejor de ustedes, gracias por abrirme los brazos cada vez que lo necesitara, gracias por levantarme el ánimo sin necesidad de tomarme un red bull, gracias por las risas infinitas, por la confianza que me regalaron en tan poco tiempo; personas como ustedes no se olvidan.
Extrañaré gritarle al mundo que tengo el negro en la taquilla, extrañaré escuchar la típica pregunta de todos los días "coño teresa, ¿cómo haces para estar tan activa?", extrañaré reírme de la risa de los demás y que los demás se rían de la mía; extrañaré infinitos momentos, pero sobre todo, los extrañaré a ustedes. Porque un mes fue suficiente tiempo para darme cuenta de que solo a alguien verdaderamente especial le otorgas la confianza que a otra persona le darías en años, porque un mes bastó para darme cuenta de que si quisiera tener un verano tan excelente como este, tendría que ser de nuevo con ustedes...
En este momento no me salen las palabras, merecen mucho mas que esto, pero me cuesta. Solo se que no cambiaría este verano por nada del mundo, porque en este verano creció una familia, y la familia nunca te abandona. Gracias por las huellas que dejaron en mi y conmigo, personas como ustedes no son fáciles de encontrar. Los amo, no debemos estar tristes porque se acabó, debemos sonreír por el simple hecho de que pasó.
- La gordita más cuchi, tere
Gracias por ser uno/a más de nosotros, por cuidarnos, por reírse y disfrutar con nosotros nuestras travesuras, por entendernos y apoyarnos en todo, por apretarnos la mano cuando ya fuese demasiado, por estar ahí incondicionalmente, por soportarnos, por darnos la confianza que en ocasiones no merecíamos, pero por sobre todas las cosas, gracias por ser parte de ésta gran familia, no hubiese sido lo mismo sin ustedes.
Y a ustedes por reírse de mis ronquidos, por echarse la culpa conmigo cada vez que mis travesuras tuvieron consecuencias, por hacerme reír con cualquier estupidez, por aconsejarme de la mejor manera (a veces), por dejarme ir al baño primero JAJAJA, por cantar conmigo a todo pulmón, y sobre todo, por todas las huellas que dejaron en mi.
"QUE CADA LÁGRIMA QUE BOTAMOS AYER..
...SE CONVIERTA EN UNA SONRISA MAÑANA"
